La talidomida es un fármaco que fue comercializado entre 1958 y 1963 por la compañía alemana Grünenthal GMBH. Esta sustancia se comercializo como tranquilizante y para aliviar las nauseas del embarazo que suelen presentarse durante los primeros meses.
Entre los diferentes nombres comerciales con los que se vendió la talidomida se encuentran las marcas Contergan, Softenon, Imidan, Noctosediv y Varian entre otras muchas.
Inicialmente la talidomida fue un medicamento muy popular ya que parecía no tener efectos secundarios y al contrario que otros somníferos y sedantes de la época no presentaba el peligro de la sobredosis accidental que si tenían el resto de los fármacos de los años 50 y 60.
Aunque desde el primer año de su comercialización este fármaco hizo que miles de bebes nacieran con malformaciones su relación directa no fue confirmada hasta noviembre del año 1961 cuando se publico un informe elaborado por el Doctor Widukind Lenz que revelaba la relación entre la malformaciones y la talidomida.
Una vez descubiertos sus efectos teratogénicos este medicamento fue rápidamente prohibido en todo el mundo.
Efectos secundarios de la talidomida
El más devastador de los efectos secundarios de la talidomida son las malformaciones congénitas que sufren los fetos de las madres o padres que toman este medicamento antes o durante el embarazo. Entre estas malformaciones se encuentra la focomelia que se trata de una enfermedad teratogénica que se caracteriza por la falta de material óseo en los miembros superiores e inferiores.
Indicaciones de la talidomida
Actualmente la talidomida se usa para tratar algunas enfermedades debido a su capacidad para impedir la formación de vasos sanguíneos denominada angiogénesis. Entre las enfermedades se encuentran el mieloma múltiple (un cáncer de la medula ósea), la lepra, el lupus eritematoso
